Si alimentas a una inteligencia artificial con tus fotografías de viajes, esos fragmentos congelados de aventura y asombro... ¿estás subvirtiendo el arte o solo estás enseñando a una máquina a imitar tu visión del mundo?
Imagínate esto: has estado por todo el mundo, capturando escenas con la lente de tu cámara. Cada foto es un testimonio silencioso de un momento que ya no existe. Ahora, decides alimentar a una IA con estas imágenes, no para conservarlas, sino para transformarlas, para "hackear" tu arte en algo nuevo.
¿Es esto reciclaje creativo o es el renacer de la imaginación? Al fin y al cabo, estás permitiendo que un algoritmo reinterprete y potencialmente distorsione tu visión original.
La práctica tiene un encanto innegable. Alimentas a la IA con tus capturas, esas composiciones meticulosamente enmarcadas de luces, sombras y texturas, y luego observas cómo emerge algo que nunca podrías haber creado solo con tu cámara y tu imaginación.
La IA se convierte en tu colaborador involuntario, un compañero de viaje que nunca estuvo allí pero que, de alguna manera, puede recrear y reimprimir tus experiencias.
Pero aquí es donde entra la dialéctica digital: estás enseñando a una inteligencia artificial a emular un estilo, tu estilo, y al hacerlo, ¿estamos acercándonos a la democratización del arte o simplemente diluyendo la esencia de la experiencia humana única en la creatividad?
Los puristas pueden argumentar que el arte generado por IA carece de alma, pero, ¿qué es el alma sino un algoritmo complejo de experiencias humanas?
Cerramos con una reflexión que tal vez desafíe la fibra misma de nuestro entendimiento creativo: Si las IA aprenden a pintar con los pinceles de nuestras propias experiencias visuales,
¿somos nosotros los creadores, o nos hemos convertido simplemente en los museos de donde la IA extrae su inspiración?
¿Es este el nacimiento de una nueva forma de arte o el principio de nuestra obsolescencia como artistas?
_______________________________________________________________________ Las fotografías que viste arriba son todas hechas con I.A. con base a una de mis fotos favoritas que pude capturar en Estambul, a continuación la foto original del mundo real.
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